Los manglares pueden acumular hasta cinco veces más carbono que los bosques terrestres y gracias a esto se ha reconocido su importante rol en la mitigación al cambio climático. Sin embargo, hasta ahora no existía certeza de cómo el ambiente puede influir a escala global en la dinámica de acumulación de carbono de estos ecosistemas. En este sentido, un reciente estudio analizó esa relación para poder explicar mejor el crecimiento y la estabilidad de los manglares, lo cual ayudará a determinar el éxito de estrategias de mitigación al cambio climático que se centren en secuestrar carbono atmosférico en bosques y suelos.
El estudio fue desarrollado de forma colaborativa por casi una docena de investigadores de todo el mundo, entre ellos, Miguel Cifuentes Jara, del Programa de Bosques, Biodiversidad y Cambio Climático del CATIE (Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza).
Aunque hay estudios previos que cuantifican la cantidad de carbono en los suelos de manglar, los datos de campo de este nuevo estudio permiten comprender con más claridad cómo funcionan los manglares y calcular el carbono con mayor precisión, mejorando así el conocimiento disponible.
El estudio también brindó datos más exactos de acumulación de carbono a nivel global. Específicamente, demostró que en lugares con sustratos que contienen carbonatos (un tipo de mineral), las cantidades de carbono orgánico en el suelo se han subestimado en un 50%. Por el contrario, en lugares con sustratos sedimentarios (deltas de ríos), esas cantidades de carbono se han sobreestimado hasta en un 86%.
A diferencia de estudios anteriores, que solo se basan en gradientes latitudinales para estimar carbono, este estudio logró identificar que el rango de amplitud de las mareas y la temperatura mínima de un sitio son determinantes para el almacenamiento de carbono en manglares. Además, se derivó un modelo estadístico que permitió calcular la cantidad de carbono almacenado en suelos de manglares, en sitios donde no se han realizado mediciones de campo
Los manglares son sumamente importantes para la estabilidad de los medios de vida de muchas comunidades rurales marino-costeras, por lo que su adecuado manejo no solo contribuirá a mitigar al cambio climático, sino que también brindará oportunidades únicas para fomentar un desarrollo rural sostenible.
Si desea leer el estudio completo, el cual fue recientemente publicado por Nature Climate Change, ingrese aquí.